Más de dos mil comuneros procedentes de las comunidades campesinas de Cotabambas y de regiones vecinas se concentraron este último lunes en el sector de Porotopampa, para participar en el encuentro más importante del calendario de fiestas de esta provincia apurimeña: el Carnaval de T’ikapallana.

Desde muy temprano y cuando el sol comienza a levantarse, hombres y mujeres ataviados con sus trajes multicolores se movilizan desde sus pueblos a caballo o a pie hasta esta planicie altoandina situada por encima de los 4,000 metros de altura sobre el nivel del mar para encontrarse por un solo día con amigos y familiares, disfrutando de esta costumbre cuyo origen se pierde con el paso del tiempo.

A medida que el día va aclarando, poco a poco comerciantes y pequeños productores se concentran en la explanada ofertando sus productos y participando en el tradicional trueque de chuño, frutas, lana de oveja, pan de quinua, entre otros productos más.

Como en toda fiesta, además de la infaltable caña y cerveza, también están presentes los músicos que con sus qashwas carnavalescas y otras melodías completan este reencuentro de todas las sangres, sellándose nuevos acuerdos familiares, disputas superadas o en búsqueda de la novia prometida que culmina poco antes de las seis de la tarde.

Lo más atractivo del carnaval de T’ikapallana que en castellano significa “acopio de flores”, es la búsqueda de la flor del Surphuy que crece en esta pampa altoandina y que forma parte del atuendo de las mujeres, mientras cabalgan de un extremo a otro de la pista acondicionada, llegando a contarse en el mejor momento más de 300 jinetes entre hombres y mujeres que se cruzan entre sí, produciéndose estrepitosas caídas que son festejadas por los asistentes.

Cabe resaltar la presencia del alcalde de la provincia de Cotabambas, Rildo Guillén Collado, quien llegó acompañado de una numerosa delegación de comuneros montados en sus briosos caballos, revalorando de esta manera la trascendencia cultural de esta fiesta costumbrista.

El Carnaval de T’ikapallana fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación por el Ministerio de Cultura mediante Resolución Nº 015-2014 del Viceministerio de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales.


Source: Correo