Siete días después de su designación como gerente general del Gobierno Regional de Apurímac, Nancy Villela Alvarado, presentó su carta de renuncia irrevocable aduciendo razones de índole personal.

La solicitud presentada el 9 de enero del 2019 al despacho de presidencia fue aceptada por el gobernador Baltazar Lantarón, quien indicó a través de voceros de la entidad, en breve designará al nuevo titular.

Villela Alvarado, poco después asumir el cargo comenzó a recibir una andanada de críticas a raíz de su controvertido paso por el Gobierno Regional del Callao y formar parte de la cúpula que encabezó el exgobernador Félix Moreno, procesado por presunto lavado de activos y favorecer irregularmente a la empresa Odebrecht en la ejecución del proyecto Costa Verde.

La funcionaria salió al frente rechazando estas acusaciones aduciendo que fueron archivadas por las instancias respectivas (Contraloría y Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios de Lima) y que era blanco de ataques discriminatorios por ser mujer.

Lejos de atizar el vendaval de críticas y no aclarar otros procesos judiciales que afrontaba en Lima éstas fueron en aumento.

La gota de agua que terminó por rebalsar el vaso, habrían sido las lapidarias afirmaciones del consejero Emerson Huashua de las filas de Llankasun Kuska -el mismo movimiento que llevó a Baltazar Lantarón al gobierno regional- que no respaldaría a funcionarios procesados, denunciados o sentenciados por delitos de corrupción.

“Razones de índole personal motivan esta decisión, por lo que solicito me dispense del plazo de ley que exige el caso de renuncia y considerarme como fecha de cese 09 de enero 2019”, precisa la carta.


Source: Correo